NOTA DE PRENSA
El director de la residencia de mayores san josé, perteneciente a la comunidad de madrid, se niega a conceder una asamblea de trabajadores convocada por el sindicato Progreso y Autonomía (PROGRESA) y posteriormente por los propios trabajadores, conculcando toda clase de derechos.
Madrid, 12 de enero de 2017. El Director de la Residencia de mayores San José, perteneciente a la Comunidad de Madrid, se niega a conceder en primera instancia una asamblea de trabajadores convocada por el sindicato Progreso y Autonomía (PROGRESA) y más tarde dice que no es competente cuando esta asamblea la piden los propios trabajadores del centro.
Los trabajadores del centro se ciñeron al Convenio Colectivo para pedir la asamblea en los términos que recoge este, firmando para pedir esta, más del 40% de trabajadores de este centro cuando solo tenían que haberlo pedido el 20%.
El responsable del centro, Eufrasio López, no solo con este acto se dedicó a transgredir la libertad sindical, sino el propio derecho de los trabajadores recogido en su propio convenio colectivo. No es de recibo que un gestor de la administración no sea objetivo en su toma de decisiones, pero mucho menos que conculque la ley de una forma tan descarada. Este acto se puso en conocimiento del consejero de políticas sociales y familia de la Comunidad de Madrid, para que parase este acto con una simple llamada, llamada que parece ser no llego nunca a producirse.
Lo más particular y llamativo de todo esto es que el Director del centro cuando recibió la convocatoria de los trabajadores negó la asamblea argumentando por escrito «No soy la persona adecuada para recibir este escrito, no estoy autorizado para tal menester», justificando sus actos con una dejación de sus funciones totalmente.
Todo este tipo de actitud digna de un estado dictatorial y nada democrático, acaba con la convocatoria de los trabajadores en la calle, a la cual acudió en dos turnos mas del 60% de la plantilla, en la puerta de la residencia, preguntándonos todos, si esto es lo que este país ha avanzado en casi 40 años de democracia y la gravedad de que esto se produzca en la misma Comunidad de Madrid, dentro de la Administración, nos llena de indignación. No todo queda aquí y será la justicia la que tenga que volver a actuar por la incompetencia de los políticos de turno y los gestores que no actúan conforme a la ley ni admiten a día de hoy la necesidad ni los derechos de sus propios trabajadores, decidiendo ellos que es lo que pueden o no pueden hacer.